viernes, 4 de julio de 2014

EL COORM ADVIERTE SOBRE LA NECESIDAD DE REVISAR LAS LENTES DE CONTACTO EN VERANO

  • Con la llegada del verano los ópticos-optometristas recomiendan visitar al especialista antes de las vacaciones.
  • Los usuarios de lentes de contacto son uno de los colectivos con más riesgo de infección ocular en las piscinas. 
Con la llegada del período estival, las altas temperaturas invitan a refrescarse y divertirse en piscinas, playas, etc. Sin embargo, en el caso de las piscinas, los productos químicos del agua y el calor provocan, en muchos casos, conjuntivitis irritativas, víricas o bacterianas propias de estas fechas. Ojos rojos, escozor, quemazón, hipersensibilidad a la luz, sensación de cuerpo extraño y lagrimeo son algunos de los síntomas comunes que alertan de la presencia de conjuntivitis. 

-       Según Ana Belén Almaida, presidenta del COORM “los usuarios de lentes de contacto son uno de los colectivos con más riesgo de poder padecer algún tipo de infección ocular en las piscinas. Por ello, las personas que usan lentes de contacto deben extremar la higiene para reducir ese riesgo, lavándose y secándose bien las manos antes de tocar las lentes y los ojos en el ambiente de las piscinas o zonas de bañoUna buena alternativa para minimizar estos riegos, es usar lentes desechables diarias. Al tirarlas al final del día evitamos la acumulación de sustancias en las lentes de contacto que puedan provocar una reacción adversa en los ojos”.

Para concienciar a la población sobre las claves y precauciones del uso de las lentes de contacto, el Colegio de Ópticos-Optometristas de la Región de Murcia, aconseja: 

-       Visitar siempre a un óptico-optometrista, tanto si eres usuario como si  quieres empezar a usar lentillas que, tras realizarte un examen visual completo, te aconsejará sobre el mejor diseño, material y sistema de mantenimiento de las lentes, en función de tu problema visual y necesidades.

-       Conservar las lentillas siempre con solución nueva. Si ésta no se renueva diariamente aumentan las posibilidades de sentir incomodidad por falta de limpieza o, incluso, llegar a tener visión borrosa.

-       Utilizar sólo las soluciones prescritas por tu óptico-optometrista para la limpieza y desinfección.

-       Dejar de usar temporalmente las lentes de contacto, ante ojos hinchados, llorosos y rojos, hasta que vuelvan a la normalidad. Consulta a tu óptico-optometrista, si es necesario te remitirá al oftalmólogo para que te recomiende el tratamiento más adecuado para solucionar tu problema.

-       No utilizar las mismas lentillas más allá de su plazo de uso recomendado, pues se deterioran y aumenta el riesgo de efectos indeseables, que podrán afectar al uso confortable de ellas a medio y largo plazo.

-       Limpiar el estuche de las lentillas y cambiarlo cada dos meses.

-       Evitar el contacto ocular con el agua de la playa o piscina.

-       No olvidar nunca las gafas graduadas. Es necesario que tus ojos puedan descansar de las lentes de contacto de vez en cuando.


-       Es recomendable proteger tus ojos y especialmente cuando uses lentes de contacto, de la radiación UV con unas gafas de sol homologadas.